En un emotivo discurso durante el evento “Women in Music” de Billboard, Taylor Swift criticó abiertamente a Scooter Braun, tras la venta de sus grabaciones maestras sin su consentimiento.

El conflicto entre ambos comenzó en junio, cuando se reveló que Scooter había adquirido los derechos de sus primeros seis álbumes a través de la compra de Big Machine Records. Taylor explicó que ni ella ni su equipo fueron informados antes de la venta, y se enteró al mismo tiempo que el resto del mundo. Este incidente marcó el inicio de una larga disputa que ha sido muy pública.

Durante su discurso, Swift dejó claro su descontento con la falta de respeto hacia los derechos de los artistas para poseer su propia música. Acusó a Scooter de aprovechar su posición de poder en la industria musical y de actuar con una “privilegiada toxicidad masculina”.

En una crítica directa a aquellos que han defendido a Braun, Taylor enfatizó que solo son amables con él porque tienen algo que él necesita, insinuando que esta dinámica de poder está arraigada en la industria.

Taylor Swift también mencionó que Braun había solicitado reunirse con ella para discutir la situación, pero ella rechazó la propuesta debido a su desconfianza.

Según Swift, este tipo de actitudes son una muestra de cómo ciertos individuos en la industria musical se benefician del trabajo y talento de otros, sin valorar su derecho a decidir sobre su propia creación artística.

A lo largo de su discurso, Swift no solo criticó la situación con Braun, sino que también aprovechó para elogiar a varias mujeres en la industria musical que han sido sus mayores apoyos en tiempos difíciles.

Destacó a artistas como Lizzo, Rosalía, Camila Cabello, Billie Eilish, entre otras, reconociendo su perseverancia y creatividad, y cómo han enfrentado el escrutinio y las críticas del mundo exterior.

Para Taylor, estas mujeres encarnan el coraje y la determinación necesarios para superar las barreras de la industria y continuar creando arte auténtico.

Swift también hizo un llamado a la importancia de apoyar a la próxima generación de mujeres artistas. Enfatizó que en algún lugar, una joven talentosa está aprendiendo música, y que es crucial que la industria la cuide y proteja sus derechos.

“La futura Mujer del Año probablemente está sentada en una lección de piano o en un coro de niñas, y hoy, ahora mismo, necesitamos cuidarla”, dijo con convicción.

El evento, que fue presentado por la amiga de Swift, Hayley Kiyoko, se centró en honrar a mujeres que han hecho contribuciones significativas a la industria musical. Kiyoko, al hablar sobre Taylor, expresó lo importante que es poder apoyarse mutuamente y celebrar los logros de sus colegas.

Con este discurso, Taylor Swift dejó claro que está decidida a seguir hablando sobre los derechos de los artistas, y no tiene miedo de enfrentarse a quienes se interpongan en su camino. A lo largo de su carrera, ha demostrado ser una voz influyente para el empoderamiento de las mujeres y la defensa de los derechos en la industria musical.