En 1976, el legendario comediante Redd Foxx, protagonista de la exitosa serie Sanford and Son, recibió a varios invitados muy especiales en el set del programa.

Entre ellos se encontraban figuras icónicas del entretenimiento como Ray Charles, Orson Welles y la actriz LaWanda Page.

Este momento histórico no solo reunió a estas luminarias del cine, la música y la comedia, sino que también capturó un instante de camaradería que ha perdurado en la memoria de quienes fueron testigos.

Ese día, tanto Sanford and Son como The Tonight Show se estaban grabando en estudios vecinos. Mientras las estrellas se movían entre los sets, surgió la oportunidad perfecta para tomar algunas fotografías que inmortalizarían el encuentro.

La atmósfera en el set de Sanford and Son estaba llena de energía, y el humor característico de Redd Foxx mantuvo a todos con una sonrisa.

Un cruce inesperado de caminos artísticos

Ray Charles, el icónico cantante y pianista, era conocido por su impresionante carrera musical, que abarcaba géneros como el soul, el jazz, el blues y el pop. Su presencia en el set de Sanford and Son no solo fue un deleite para el público, sino también un homenaje a la capacidad del programa de atraer a personalidades de distintos ámbitos.

Ver a Charles y Foxx compartir un momento de risa y complicidad fue un recordatorio del profundo respeto mutuo que existía entre artistas de diferentes disciplinas.

Por otro lado, Orson Welles, aclamado director y actor, famoso por clásicos del cine como Ciudadano Kane, aportaba una presencia imponente.

Aunque era más conocido por su trabajo detrás de cámaras, su visita al set de comedia reflejaba su versatilidad y aprecio por otros géneros.

Welles, con su característico tono de voz grave y su aire de misterio, contrastaba con la comedia desenfrenada del programa, pero al mismo tiempo, encajaba a la perfección en la escena.

LaWanda Page y su conexión especial con Foxx

La actriz LaWanda Page, quien interpretaba a “Aunt Esther” en Sanford and Son, fue una de las estrellas invitadas que compartió este momento único.

Su relación con Foxx iba más allá de la pantalla, ya que ambos eran amigos cercanos desde su juventud en St. Louis. Verlos juntos en ese día especial fue un testimonio de la química inigualable que los hizo tan queridos por el público.

Este momento histórico, donde tres gigantes del entretenimiento convergieron en un set de comedia, dejó una huella imborrable en la televisión y el cine.

Aunque fue un encuentro breve, su impacto aún se recuerda como uno de los grandes cruces de caminos entre la música, el cine y la comedia.