El rey Felipe VI y su esposa Letizia celebran su décimo aniversario en el trono, así como sus 20 años de matrimonio. Es un buen momento para recordar cinco hechos que quizás hayas olvidado sobre la realeza española. Empezaremos con los escándalos que permitieron al príncipe Felipe convertirse en rey de España.

El rey Juan Carlos I abdicó en junio de 2014, después de 39 años de reinado. Conocido como el rey de la democracia tras los años franquistas, Juan Carlos fue alcanzado por numerosos escándalos de corrupción y fraude fiscal que lo llevaron a abdicar. Este fue el motivo por el cual su hijo Felipe pudo acceder al trono a los 46 años.

La reputación de Juan Carlos se vio gravemente afectada por las acusaciones de corrupción. En 2020, la situación se intensificó cuando una de sus ex-amantes lo grabó sin su consentimiento y lo acusó de utilizarla para esconder fondos en Suiza y Panamá. Se alegó que Juan Carlos había desviado varios millones de euros. En respuesta a estas revelaciones, el rey Felipe VI anunció que renunciaba a la herencia de su padre y le retiraba su asignación anual del Palacio Real.

En 2020, Juan Carlos fue obligado a abandonar el país. Aunque en 2022 la justicia española archivó todas las investigaciones en su contra, el daño a su reputación ya estaba hecho. El exilio de Juan Carlos fue un momento decisivo para la monarquía española, marcando una ruptura con el pasado y subrayando el compromiso de Felipe VI con la transparencia y la integridad.

Cristina de Borbón, hermana del rey Felipe VI, también tuvo problemas con la justicia. Fue juzgada por complicidad en un caso de fraude fiscal relacionado con su esposo, Iñaki Urdangarin. Se les acusó de desviar varios millones de euros de subvenciones públicas a través de una fundación que presidía Urdangarin. Aunque Cristina fue absuelta en 2016, su esposo fue condenado a más de seis años de prisión. Este escándalo sacudió a la familia real y planteó serias dudas sobre su integridad.

Otro escándalo importante ocurrió en 2012, cuando el diario El Mundo reveló que Juan Carlos se había fracturado la cadera durante una cacería de elefantes en Botsuana, que le costó la modesta suma de 30,000 euros. Las fotos del rey posando con un elefante muerto causaron indignación pública. El monarca tuvo que ser repatriado de urgencia a España para ser operado, lo que provocó aún más controversia ya que los costos fueron cubiertos por los contribuyentes españoles. En respuesta a la indignación pública, Juan Carlos declaró: “Lo siento mucho. Me he equivocado y no volverá a ocurrir.”

En medio de estos escándalos, la historia de amor entre Felipe y Letizia se destaca como un aspecto positivo y esperanzador para la monarquía española. Felipe se enamoró de Letizia Ortiz, una plebeya y nieta de un taxista, algo poco común hace 20 años. Letizia, quien era periodista y presentadora de noticias en la televisión española, ingresó a la familia real a los 31 años. Su matrimonio fue visto como una señal de modernización para la monarquía.

Letizia se ha convertido en una de las personalidades más queridas de la familia real española. Es conocida por su dedicación a causas sociales, su estilo elegante y su capacidad para conectar con el público. Su transformación de periodista a reina ha sido un viaje notable, y su popularidad ha ayudado a mejorar la imagen de la monarquía en tiempos de crisis.

El reinado de Felipe VI ha estado marcado por numerosos desafíos. Al asumir el trono en 2014, tuvo que enfrentarse a una monarquía en crisis, con la reputación de su padre en ruinas y una creciente desconfianza pública hacia la institución. Felipe VI ha trabajado arduamente para restaurar la confianza en la monarquía, enfatizando la transparencia, la integridad y el servicio público.

Una de sus primeras acciones fue reducir el presupuesto de la casa real y hacer pública su asignación anual. También ha adoptado una postura firme contra la corrupción, renunciando a cualquier herencia de su padre y distanciándose de cualquier conducta inapropiada. Estas medidas han sido bien recibidas por el público y han ayudado a mejorar la percepción de la monarquía.

Otro desafío importante para Felipe VI ha sido la cuestión de la unidad de España. La crisis catalana de 2017, en la que la región de Cataluña intentó declarar su independencia, fue un momento crítico para su reinado. Felipe VI adoptó una postura firme en defensa de la unidad de España y el estado de derecho. En un discurso televisado, condenó las acciones de los líderes catalanes y enfatizó la necesidad de respetar la constitución española.

Aunque su postura fue apoyada por muchos españoles, también fue criticada por algunos sectores que consideraron que no hizo lo suficiente para promover el diálogo. La crisis catalana sigue siendo un tema delicado en España, y la monarquía juega un papel crucial en la preservación de la unidad nacional.

Bajo el liderazgo de Felipe VI y Letizia, la monarquía española ha intentado modernizarse y acercarse más al pueblo. Han aumentado su presencia en eventos públicos, han apoyado diversas causas sociales y han tratado de proyectar una imagen de cercanía y humildad. Letizia, en particular, ha sido una defensora de los derechos de las mujeres, la educación y la salud pública.

Además, han utilizado las redes sociales para comunicarse directamente con los ciudadanos, lo que ha ayudado a humanizar la imagen de la familia real y hacerla más accesible. Estos esfuerzos de modernización han sido clave para mantener la relevancia de la monarquía en una sociedad en constante cambio.

A pesar de los desafíos, el décimo aniversario de Felipe VI en el trono y el vigésimo aniversario de su matrimonio con Letizia son momentos de celebración y reflexión. Estos hitos no solo marcan la longevidad de su reinado y matrimonio, sino también su resiliencia frente a las adversidades. Las celebraciones incluyen eventos públicos y privados, donde se reconoce el servicio continuo de la pareja real a España.

Mirando hacia el futuro, la monarquía española enfrentará nuevos desafíos y oportunidades. La generación más joven, incluida la princesa Leonor, heredera al trono, jugará un papel crucial en la evolución de la institución. La educación y formación de Leonor han sido una prioridad para Felipe y Letizia, asegurando que esté preparada para sus futuras responsabilidades.

El compromiso de Felipe VI y Letizia con la transparencia, la modernización y el servicio público continuará siendo fundamental para mantener la relevancia y el apoyo a la monarquía en España. Su capacidad para adaptarse a los cambios sociales y políticos determinará en gran medida el éxito de la monarquía en los años venideros.

En conclusión, los últimos diez años de reinado de Felipe VI y Letizia han sido una mezcla de desafíos y éxitos. Han trabajado arduamente para restaurar la confianza en la monarquía, modernizar la institución y mantenerse conectados con el pueblo español. A medida que celebran estos hitos, la pareja real sigue comprometida con su deber de servir a España y garantizar un futuro próspero para la monarquía.