El reconocido cantante brasileño Roberto Carlos, una de las figuras más icónicas de la música en América Latina y el mundo, ha sido siempre un hombre de pocas palabras en cuanto a su vida personal. A pesar de décadas en el centro de la atención mediática, Roberto ha sabido mantener un aura de misterio alrededor de ciertos aspectos de su vida, alimentando rumores y especulaciones a lo largo de los años. Sin embargo, a sus 83 años, el “Rey de la Música Romántica” ha decidido finalmente hacer una confesión que ha dejado a sus seguidores atónitos, y que muchos sospechaban desde hace tiempo.

Roberto Carlos Braga, nacido el 19 de abril de 1941 en Cachoeiro de Itapemirim, Brasil, alcanzó la fama en los años 60 y rápidamente se consolidó como uno de los artistas más importantes de la música en portugués y español. Su estilo romántico y su voz inconfundible han cautivado a varias generaciones, con canciones icónicas como “Amigo”, “Detalles”, y “Emociones” que se han convertido en parte del patrimonio cultural de la música latinoamericana.

 

A lo largo de su carrera, Roberto Carlos ha vendido más de 140 millones de discos, un logro que lo coloca entre los artistas más vendidos del mundo. Pero más allá de sus éxitos musicales, el cantante también ha sido objeto de muchas especulaciones y rumores sobre su vida personal, su espiritualidad y su estado de salud, especialmente en los últimos años.

A lo largo de los años, Roberto Carlos ha sido extremadamente reservado acerca de varios aspectos de su vida. Si bien siempre ha sido un hombre devoto y se ha mantenido firme en su fe católica, los rumores sobre sus creencias y sobre algunas decisiones tomadas a lo largo de su vida siempre han sido un tema de conversación entre sus fanáticos y la prensa.

La confesión que finalmente ha decidido hacer pública a los 83 años es que, a lo largo de su carrera, ha estado lidiando con una profunda lucha personal que ha mantenido en secreto durante décadas. En una entrevista reciente con un medio brasileño, el artista reveló que ha estado luchando con el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) desde su juventud.

El trastorno obsesivo-compulsivo es una condición mental caracterizada por pensamientos intrusivos y recurrentes (obsesiones) y comportamientos repetitivos (compulsiones) que la persona siente que debe realizar para calmar la ansiedad que le generan esas obsesiones. Para Roberto Carlos, el TOC ha sido una lucha constante que ha influido tanto en su vida personal como en su carrera profesional.

 

El artista explicó que sus rituales y obsesiones han afectado profundamente la manera en que aborda su día a día, desde pequeños gestos cotidianos hasta la forma en que lleva a cabo sus presentaciones en el escenario. Uno de los ejemplos más notorios que mencionó fue su necesidad de evitar ciertas palabras al hablar o cantar, por considerarlas “de mala suerte”. Durante años, sus allegados y colaboradores han notado estos patrones, pero fue una lucha que Roberto mantuvo mayormente en secreto.

“Hay muchas cosas que he hecho a lo largo de mi vida que la gente no entendía. Siempre he sido una persona supersticiosa, pero detrás de esa superstición había algo más profundo, algo que me controlaba y que no podía ignorar”, confesó Roberto Carlos.

Uno de los aspectos más llamativos de su TOC ha sido la forma en que las supersticiones y rituales específicos han jugado un papel clave en su vida. Desde hace muchos años, se sabía que Roberto Carlos tenía ciertas creencias sobre los colores y las palabras. Por ejemplo, evitaba usar el color marrón y el color morado, y siempre prefería el blanco y el azul, colores que asociaba con la suerte y la paz.

Además, evitaba decir ciertas palabras relacionadas con la muerte, la mala suerte o el sufrimiento. “Había veces en las que, al componer una canción, tenía que reescribir varias veces las letras para evitar términos que me hacían sentir incómodo. Fue un proceso doloroso, pero sentía que era necesario para mi bienestar emocional”, explicó el cantante.

 

Estas supersticiones no solo afectaban su vida profesional, sino también su vida personal. Sus amigos y familiares cercanos sabían que ciertos temas eran tabú en su presencia, y que ciertos gestos o hábitos eran esenciales para mantener su tranquilidad mental. A pesar de que estos comportamientos eran visibles para aquellos más cercanos a él, la verdadera magnitud de su lucha interna no era conocida hasta ahora.

El trastorno obsesivo-compulsivo no solo afectaba los momentos públicos de Roberto Carlos, sino que también influía en su vida privada. Durante años, el artista intentó ocultar su condición para evitar que se convirtiera en un tema de conversación en los medios. “No quería que la gente me viera como alguien débil o como alguien que no tenía el control de su vida”, confesó. Sin embargo, a medida que envejecía, sintió la necesidad de ser más honesto consigo mismo y con su audiencia.

Esta confesión ha provocado una oleada de apoyo por parte de sus seguidores, quienes admiran aún más la fortaleza del cantante para seguir adelante con su carrera a pesar de las dificultades. En las redes sociales, los fanáticos han expresado su sorpresa y respeto por la valentía de Roberto Carlos al hablar sobre un tema tan personal y que afecta a tantas personas en el mundo.

A pesar de la dura lucha que ha enfrentado a lo largo de su vida, Roberto Carlos también quiso dejar un mensaje de esperanza para aquellos que padecen trastornos mentales similares. “He aprendido a convivir con esta condición. No ha sido fácil, pero es parte de quien soy. Lo más importante es buscar ayuda y aprender a no dejar que estas cosas controlen tu vida por completo”, afirmó.

 

El artista también compartió que, a lo largo de los años, ha recurrido a la terapia y a profesionales de la salud mental para poder sobrellevar su TOC. Aunque ha habido momentos muy difíciles, Roberto Carlos asegura que ha encontrado un equilibrio que le permite seguir adelante con su vida y su música.

A sus 83 años, Roberto Carlos sigue siendo una de las figuras más queridas en la música latina. Su confesión sobre el TOC no solo ha humanizado a una leyenda de la música, sino que también ha abierto una conversación importante sobre la salud mental y el impacto que puede tener en la vida de las personas, incluso aquellas que parecen tenerlo todo.

Con más de seis décadas de carrera, Roberto Carlos ha dejado una marca imborrable en la música y en la cultura popular. Su legado, lejos de verse afectado por esta confesión, se ha fortalecido aún más, ya que ha demostrado que incluso los más grandes ídolos tienen luchas internas y dificultades que superar.

La confesión de Roberto Carlos sobre su lucha con el trastorno obsesivo-compulsivo ha sorprendido a sus seguidores, pero también ha generado una ola de comprensión y apoyo. A sus 83 años, el cantante ha demostrado que, a pesar de los desafíos personales, su amor por la música y su compromiso con su público siguen siendo tan fuertes como siempre.

 

Este revelador momento en la vida de Roberto Carlos ha servido para humanizar aún más a una figura que muchos ya consideraban como un ícono intocable. Su valentía al hablar abiertamente sobre su condición no solo le ha ganado el respeto de sus seguidores, sino que también ha puesto de relieve la importancia de hablar sobre la salud mental, independientemente del éxito o la fama. Sin duda, Roberto Carlos sigue siendo el “Rey”, no solo de la música romántica, sino también del coraje y la superación.