En el episodio del 17 de septiembre de MasterChef Celebrity, se vivieron momentos de tensión y emoción que capturaron la atención de los espectadores.

La dinámica del programa trajo a la luz las habilidades culinarias de los concursantes, así como las complejas relaciones que se forman en medio de la competencia.

Los protagonistas de la noche, Paola Rey, Franco Bonilla y Cony, se unieron en un trío para participar en un reto de cocina en parejas.

Este desafío no solo requería destreza culinaria, sino también una buena comunicación y trabajo en equipo.

Con entusiasmo, Paola compartió que había cocinado previamente el platillo que tenían que presentar, lo que le dio una ventaja considerable.

MasterChef: Reacción de Franko de que Cony ganara pin

El trío decidió preparar un plato sofisticado que consistía en panceta de cerdo cocinada en doble cocción, marinada en salmuera asiática, acompañada de puntas de arracacha también cocinadas de forma meticulosa, y un puré de berenjena ahumada.

Paola explicó con detalle el proceso, mencionando que la panceta llevaba una reducción de jengibre y que habían utilizado el agua de la arracacha para hacer una miel, lo que demostró un enfoque innovador y creativo en la cocina.

La chef Adriá Marina fue muy elogiosa al comentar sobre el plato. Destacó que estaba “rico y de buen sabor”, y se mostró impresionada con la presentación, que consideró “preciosa”.

Sin embargo, también hizo hincapié en que la segunda cocción del cerdo había bajado un poco el nivel del platillo, un detalle que, aunque menor, no pasó desapercibido para el jurado.

El chef Jorge Rausch coincidió en que el plato tenía una complejidad de sabores admirable, resaltando que el error en la cocción del cerdo era fácil de solucionar.

MasterChef: Franko y su respuesta tras no ayudar a Cony

Al final, el trío fue declarado ganador del reto, pero esto dio lugar a un dilema significativo entre los miembros del equipo, ya que solo había dos pines de inmunidad en juego.

Franco, como parte del trío victorioso, tuvo el privilegio de quitarse el delantal negro, lo que generó un ambiente de tensión respecto a quién recibiría los dos pines restantes.

Tras una breve discusión, el grupo decidió que Paola debería recibir uno de los pines, lo que causó un pequeño conflicto entre Cony y Franco.

Cony expresó su decepción, argumentando que no había tenido la oportunidad de obtener un pin de inmunidad y que ya había una ventaja clara para Franco al quitarse el delantal negro.

Esta situación creó un momento tenso en el set, con las cámaras enfocando la incomodidad del momento.

A pesar de las emociones, Paola tomó la decisión de elegir a Cony para el segundo pin, justificando que había sido la segunda persona más activa y comprometida en el equipo.

Este momento generó una mezcla de reacciones entre los concursantes, ya que mientras algunos apoyaban la decisión de Paola, otros se sintieron incómodos con la dinámica del equipo.

MasterChef: Cony y Franko discuten por el pin inmunidad

Cony, aunque finalmente recibió el pin, dejó claro que el proceso no le había hecho sentir bien, expresando su tristeza ante las cámaras.

En el cierre del episodio, Franco tuvo que escoger a alguien para que llevara el delantal negro que él había dejado de usar.

En un giro de humor, optó por Beyo, pero no sin antes mencionar que realmente quería dárselo a Cony, dejando entrever la complejidad de las relaciones interpersonales en la competencia.

Este episodio no solo destacó las habilidades culinarias de los concursantes, sino que también puso de relieve las dinámicas de grupo, la toma de decisiones en equipo y las emociones que surgen en un ambiente competitivo.

Los espectadores quedaron intrigados no solo por la calidad de la comida presentada, sino también por la interacción entre los concursantes, que hizo del episodio una experiencia memorable.