Después de dos matrimonios fallidos, Corey Gamble parecía ser el compañero perfecto para Kris Jenner, prometiendo nunca engañarla ni abandonarla. Sin embargo, la triste realidad es todo lo contrario. Corey, ¿realmente es quien dice ser o se ha visto atrapado en sus mentiras?

La relación entre Kris y Corey fue inicialmente cercana y solidaria, basada en el respeto mutuo y la compañía constante. Aunque la pareja parecía feliz en la superficie, pronto surgieron rumores y tensiones que revelaron grietas en su relación.

Corey, 25 años menor que Kris, ha sido su pareja durante casi una década, pero últimamente la relación de apoyo entre ellos ha sufrido daños irreparables. Recientemente, Corey incluso puso fin a la relación por una razón muy extraña: Kris se ha enfadado mucho con él y ha afirmado que Corey ha mostrado su verdadera cara, dejándola desconcertada y sin saber cómo procesar esta situación.

La historia de amor entre Kris y Corey comenzó en 2014, cuando se conocieron en una fiesta. En ese entonces, Corey trabajaba como manager de gira de Justin Bieber y estaba vinculado al mundo del entretenimiento, lo que lo llevó a cruzarse con Kris durante un momento vulnerable de su vida tras su divorcio de Caitlyn Jenner.

A pesar de la diferencia de edad y las dudas iniciales de los hijos de Kris sobre Corey, la pareja se volvió inseparable rápidamente. Hicieron su primera aparición juntos en la alfombra roja del Met Gala, donde mostraron su complicidad y amor público. Sin embargo, los comentarios de los hijos de Kris sobre la diferencia de edad y las preocupaciones sobre la rapidez con la que Kris se había involucrado con Corey siempre estuvieron presentes.

A medida que la relación progresaba, surgieron tensiones adicionales. Durante un episodio de Keeping Up with the Kardashians, Kanye West confrontó a Corey sobre su naturaleza reservada y el hecho de que la familia Kardashian-Jenner nunca había conocido a su familia. Esta confrontación causó una brecha en la relación entre Corey y algunos miembros de la familia, aunque Kris intentó mantener la paz.

Sin embargo, las cosas tomaron un giro drástico cuando se reveló que Corey había sido infiel a Kris con una amiga cercana de la familia durante una fiesta privada. Esta noticia causó una gran conmoción en el círculo íntimo de los Kardashian y puso en duda la integridad de Corey. A pesar de negar las acusaciones, las tensiones entre Kris y Corey alcanzaron su punto máximo, llevándolos a considerar una separación temporal para reflexionar sobre su relación y sus futuros pasos.

En conclusión, la historia de Kris Jenner y Corey Gamble es un ejemplo de los altibajos en las relaciones, especialmente bajo el escrutinio constante de los medios y del público. A pesar de sus esfuerzos por mantener una fachada de felicidad, la realidad detrás de las cámaras ha demostrado ser mucho más compleja y difícil de manejar para esta pareja.